Micenas 4 Al norte de la ciudadela una estrecha galería se hunde en la tierra, atraviesa la muralla y lleva hasta un depósito de agua subterráneo, que aseguraba el abastecimiento de agua a la ciudadela en caso de asedio.
En la fotografía se aprecia el grosor de la muralla, cuya construcción los griegos de la época clásica atribuían a los míticos Cíclopes. Desconocedores del principio arquitectónico del arco, los micénicos utilizaban la falsa bóveda, que se consigue por aproximación de hiladas, y el dintel.